Cuando hablamos de
Campus nos referimos al conjunto de edificios y espacios abiertos que conforman
el territorio de una universidad. Hoy la Plaza Houssay es ese
lugar, un espacio rodeado de edificios de la Universidad de Buenos Aires, como
la Facultad de Ciencias
Económicas y su nuevo anexo, la Facultad
de Medicina, la Facultad de Odontología y el Hospital
de Clínicas — hospital escuela — además de contar con un importante desarrollo gastronómico, cultural, de transportes, de áreas verdes y estacionamiento. Pero ¿siempre
fue así? Más o menos…
En la manzana rodeada por la Av. Córdoba y las calles Uriburu, Junin y Paraguay, en el límite de los barrios de Balvanera y Recoleta, se construyó en el año 1877 la
primera sede estable del Hospital de Clínicas, llamado en aquel entonces,
Buenos Aires, que en el año 1884 fue transferido a la Universidad
de Buenos Aires y que quedó rápidamente obsoleto por los avances de la medicina de la época. Por sus pasillos
caminaron celebridades como los doctores
Pirovano, Lagleyze y Posadas y su reputación
fue y es reconocida en el mundo. En él se hizo la primera punción de
riñón, la primera aplicación de insulina en diabéticos, el primer cateterismo y se filmó la primera
operación. Ya desde finales del siglo XIX
se comenzó a pensar en un nuevo
“Policlínico José de San Martín” que lo
reemplazaría, en la manzana opuesta donde está la plaza hoy, sobre la calle
Uriburu. Su construcción se demoró décadas
y finalmente en 1975 se demolió el viejo hospital del cual solo se mantuvo en
pie la Parroquia San Lucas, en un intento por
mantener los edificios históricos. El nuevo edificio del Hospital de Clínicas José de San Martín se comenzó a construir en el año 1939. El proyecto ganador fue el de Rafael Sammartino, diseñado dentro de un “estilo internacional” de la época, que combinaba
art decó tardío con rasgos funcionalistas y un carácter
monumental.
Con la construcción del primer Hospital
Buenos Aires el traslado de la Facultad
de Medicina, hasta ese entonces
ubicada en San Telmo, fue cuestión práctica. Su nuevo
edificio fue construido por Francisco Tamburini y ampliado por Gino Aloisi. Esa ampliación se convirtió
luego en la Facultad de Ciencias económicas, manteniéndose allí la morgue y en el terreno donde estaba el de Tamburini, que había sido demolido, es donde hoy se encuentra
el anexo de la Facultad
de Ciencias Económicas.
En el predio donde se levantaba
el viejo Hospital, en el año 1980 se inauguró la plaza, que fue el emblema
de las plazas de hormigón,
una de las tantas obras de la época militar a cargo del intendente Osvaldo
Cacciatore: puro cemento, bancos y juegos fríos, caminos estrechos y desniveles. Diseño que tenía la premisa de que cualquier espacio
público era peligroso
y cuanto menos se usara mejor.
Plaza que con el tiempo y el abandono se convirtió en un lugar peligroso, lugar
de asentamientos precarios, robos, secuestros y denuncias por zonas liberadas.
Lleva el nombre de Bernardo Houssay, por el medico argentino premio Nobel de medicina en el año 1947, primero en Latinoamérica.
En el año 2015,
finalmente después de muchas idas y vueltas, la Ciudad de Buenos Aires inauguró
allí el primer Campus Urbano, ubicado en el primer subsuelo
del estacionamiento que se encuentra
en la plaza, polo de innovación, talento y creatividad. Se crearon áreas gastronómicas, áreas culturales, zonas
deportivas, estación saludable, de eco bici, wifi, se mejoró la estación de subte, la iluminación y se colocaron
cámaras. Y a las tipas y jacarandas, que originalmente encontrábamos allí, sumaron un 50% de áreas verdes.
Los vecinos disfrutan
hoy de la nueva plaza y los estudiantes de las entre-horas, pero como todo, también tiene su lado negativo porque algunos se quejan del aumento de los alquileres
y de las comidas por el mejoramiento de la zona.
Ya la salida pasada
pudimos disfrutar de nuestro primer encuentro presencial post pandemia.
Emocionante después de tanto tiempo de virtualidad y al reencontrar seres queridos. Somos otros, algunos cambiamos el look, otros, tal vez todos, la forma de ver la vida porque nos dimos cuenta de que hay que disfrutar
hoy porque no sabemos que nos deparará el mañana.
Todo tiene su lado bueno y su lado no tan bueno, hasta las salidas croquiseras. ¿Virtuales o presenciales? ¿Quién lo puede asegurar?
Sandra Machado
Ana Sloninsky
Victoria Braunstein
Mayca Alberto
Roberto Frangella
Luis Marcellini
Cris Monmany
Manuel Dominguez
Lucila Tessandori
Gustavo Colotto
Patricia Amodei
Sonia Pesajovich
Eduardo Liserra
Stella Maris Dotti
Chuni Torrassa
Silvia Simonit
Marita Salas
Cesar Murga
Sandro Borghini
Eleonora Dorrego
Gisela Guerrieri
Magdalena Eggers
Gabi Reale
Maria Isabel Romero
Sandra Tabera
Ana Laplaza
Juan Carlos San Gil
Monito Gersbach
Irina Fallik
Malvina Fernandez
Carlos Saenz
Patricia Alvarez
Cesar Malluk
Adriana Pedraglio
Carlos Ford
Mónica Verduri
Carlos Marino
Elisa Laferriere
Claudia Fueyo
Mariano Manikis
Clara González Bolognesi
Viviana Ferrareis
Monito Gersbach
Irina Fallik
Malvina Fernandez
Carlos Saenz
Patricia Alvarez
Cesar Malluk
Adriana Pedraglio
Carlos Ford
Mónica Verduri
Carlos Marino
Elisa Laferriere
Claudia Fueyo
Mariano Manikis
Clara González Bolognesi
Viviana Ferrareis
Adhemar Orallana Rioja
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