Croquiseros Urbanos - Bs. As.: noviembre 2020

Desde las Barrancas de Belgrano hasta el Río de la Plata, hay aproximadamente 2 km. Situaciones similares suceden con Plaza San Martín o Parque Lezama. Esas tierras pertenecían a la “pampa deprimida”, cuyos terrenos eran de escasa pendiente, llegando desde el centro de la ciudad hasta el río.
Toda esta área la conocemos como “El Bajo” y alguna vez … fue agua.
Su relleno, comenzó hace mucho tiempo, mediados de 1800, cuando por intereses políticos y económicos, esa barranca verde fue objeto de sucesivas nivelaciones del terreno, que borraron lentamente las huellas de sus aguas y la línea de sus costas. Las diferentes autoridades de cada época, decidieron ampliar la Ciudad, sistemáticamente usando el río y dejándolo, cada vez, más lejos. El encuentro de esos dos horizontes, uno verde de la barranca y el marrón del agua, fue quedando desdibujado. Se calculan que, desde 1900 en adelante, se rellenaron 3000 has. de la costa del Río de la Plata. Se usaron para ello, escombros de la apertura de la 9 de Julio, de las diagonales Norte y Sur, de la realización del subte B y diversas autopistas.
¿Por qué hablamos hoy de Costanera Norte? Porque hoy es un tema de conflicto.
El desarrollo económico y social de Bs. As, el puerto como fuente de trabajo y la inmigración de millones de personas, afectó la traza y el paisaje urbano de la Ciudad, marcando su destino por siglos, ya que la costa era percibida como lugar de trabajo, dejando de lado estética y proyectos de paisaje. Es así que, cuanto más se alejaba la ciudad del rio, más codiciado era, ya que todos querían disfrutar su brisa, sus vistas.
Durante la intendencia de Carlos Noel (1923/1927), comenzó el primer plan global de gran escala, de toda la ciudad, con la creación del Proyecto Orgánico para la Urbanización del Municipio, con criterios donde prevalecía lo urbanístico y estético, tratando de equilibrar la estructura urbana. Entre las propuestas de Forestier, paisajista francés, estaba la creación de la Av. Costanera, acompañada de una franja de parques, en toda su extensión, y barrios residenciales en la barranca. La idea era jerarquizar el perfil fluvial, ampliando los bosques de Palermo con tierras de relleno, construir barrios parque y crear un eje con la Av. Sarmiento y el muelle del Club de Pescadores. Intervención de la cual participó Carlos Thays, también.
En el año 1938, el Consejo Deliberante sancionó una ordenanza donde destinaba esas tierras a construir un Parque Ribereño, desde la calle Salguero hasta La Pampa y desde la costa hasta la línea del Ferrocarril Central Córdoba, después Belgrano Norte. Se dividía en dos sectores, “Bosque Alegre”, entre calles Sarmiento, Costanera, Salguero y “Bosque autóctono” entre calles Salguero, Costanera, La Pampa. Pero…en el año 1946, otra ordenanza le cedió parte de esos terrenos al Aeroparque, con lo cual, solo quedó el sector “Bosque Alegre”, entre Sarmiento y Salguero, que se parquizó con áreas verdes. Poco a poco fue perdiendo superficie con la construcción del circuito KDT, la Av. Lugones, la Autopista Ilia y el viaducto Sarmiento y finalmente, la ampliación del aeroparque, podríamos decir que se lo comió, ya que quedó incluido dentro de su predio.
Muchos arquitectos hicieron proyectos que iban de Puerto Madero hasta Ciudad Universitaria, Se construyeron dársenas, diques, amarraderos, la Av. Costanera Sur, con sus playas en el Balneario Municipal, sus pérgolas, bares y la rambla frente al Mar Dulce, como lo bautizó Solís. Aún Le Corbusier, durante su visita en 1929, realizó un proyecto, agregando a la propuesta un aeropuerto sobre el agua. Pero la Costanera Norte, en sus comienzos, era donde los jóvenes se juntaban a desplegar su destreza pescando los fines de semana, junto a su Club de Pescadores. Gente de otro perfil, sin multitudes en las playas, sin chicas en malla, sin puerto, sin bares. Pero la línea costera comenzó a modificar su traza, poco a poco, y así surgieron los primeros carritos, el murallón, Costa Salguero y Punta Carrasco. La relación de la Ciudad y su río, siempre fue contradictoria. Por un lado, se quería acercar, pero por el otro se alejaba, permitiendo no solo que su río estuviera contaminado, sino también, dándole la espalda, con cada obra que ejecutaba.
Hoy un nuevo conflicto se plantea. Los terrenos de Costa Salguero y Punta Carrasco, que fueron concesionados en el año 1988, y luego, postergados indefinidamente por los gobiernos que siguieron, salen a la venta para la realización de un mega proyecto urbanístico. Corresponden al sector 5 del Programa Distrito Joven, plan de urbanización que abarca desde la reserva ecológica de Ciudad Universitaria hasta Costa Salguero. Contempla viviendas, oficinas, locales gastronómicos y comerciales. El 26% será vendido para edificios, calles y veredas y el resto, el 76%, serán espacios públicos, en especial, espacios verdes. La legislatura porteña, a fines del 2019 le dio el visto bueno al GCBA, para abrir el concurso público, organizado por la FADU y la SCA. De las 99 propuestas, la ganadora fue la de los arquitectos Menichetti y Frank.
Desde ya y como todo en esta vida, unos están a favor y otros no. Algunos creen que esta propuesta alejará más a la ciudad del río, que no permitirá a su gente disfrutarlo y otros creen que será mejor. Así que esta vez, seremos parte de esta incógnita Dibujaremos, pero en esta oportunidad… también soñaremos que nos gustaría encontrar, al llegar al río. Sandra Machado

ROBERTO FRANGELLA