domingo, 18 de agosto de 2019

Croquiseros Urbanos Bs. As - Salida Nº101 – Iglesia de Balvanera - 17/08/19

Y volvemos, una vez más, al Barrio de Balvanera. Su historia ya la conocemos un poco, por nuestra salida anterior, la Nº 100. Así que hoy nos dedicaremos, principalmente, a las calles Bartolomé Mitre y Azcuénaga. Sector netamente comercial, por donde miles de personas transitan durante todo el día. Sus calles son siempre caóticas, no solo por el tránsito, sino también por gente que va y viene de la estación de subte y del tren. Y por allí, en esa zona saturada de día y desierta de noche, entre telas, botones, lentejuelas, ropa y tuppers, nos encontramos con una de las iglesias más antiguas de Balvanera, la Nº 12, que le dio nombre al barrio, pero que ahora es más conocida por ser el Santuario San Expedito, el santo de las causas urgentes, que reúne todos los años miles de fieles.
El origen de la iglesia se remonta al año 1797, cuando los frailes Damián Pérez y Juan Rodríguez, bajo la advocación de la Virgen de Valvanera (de España) – con v corta – construyen, en terrenos cedidos por los esposos González Varela, un hospicio, un refectorio y un oratorio que fue el antecesor de la iglesia. Gracias al aporte de los vecinos se terminó en 1807 y en 1833, comenzó la construcción del nuevo templo, que fue inaugurado por Rosas en 1842. Más tarde, en 1856, el Arq. Picarel aumentó la altura de la cúpula y a tres, el número de naves. Exteriormente es bastante simple, pero su interior es muy llamativo, con vitrales franceses, altar proveniente de Italia y querubines y adornos de Nicolla Gully, escultor italiano. Tiene características góticas, con naves laterales separadas de la nave central por columnas y arcos de medio punto. Su cúpula es de base circular y se relaciona con el estilo, por los vitrales en forma de óculos. Tiene también, un importante órgano, del cual se desconoce su origen.
En el año 2004, un párroco encontró una imagen de San Expedito, que había sido apartada durante el Concilio Vaticano II. Le realizó un altar, y allí la colocó, para satisfacer los pedidos de la gente que sabía de su existencia. Y a partir de allí, la convocatoria nunca fue la misma. Todos los 19 de abril, miles y miles de personas hacen cola para solicitar sus milagros.
A partir del año 2016 se inició la restauración de la iglesia, principalmente la fachada sobre Azcuénaga, afectada por una gran humedad. Expertos se ocuparán, a partir de entonces, de volverla a sus orígenes.
También en esa esquina nace el Colegio San José, que se fundó por iniciativa del gobernador de Bs. As, Pastor Obligado, quien convocó a los Padres Bayoneses que alquilaron un terreno y en una construcción precaria comenzaron a dar clases en 1858. Más tarde, la congregación adquirió un terreno en la calle Cangallo, actual Perón, donde construyeron el edificio que vemos actualmente y que fue inaugurado en 1859. A partir de 1879 sufrió varias ampliaciones. En 1891 se inauguró la capilla proyectada, siguiendo las enseñanzas del arquitecto Eugene Viollet le Duc y la última ampliación fue en 1910 hecha por Pablo Hary, ex alumno y docente de la escuela de arquitectura, modificando la torre, donde se instaló el 1º observatorio astronómico de la ciudad, que aún funciona. Conviven allí, estructuras de impronta neogótica e italianizante, con otras de carácter neoclásico francés, como la fachada sur y la del acceso principal, con su marquesina de hierro forjado. Por la crisis económica de 1990, corrió el riesgo de ser cerrado. Pero gracias a ex alumnos, fue declarado monumento histórico nacional, conjuntamente con la Iglesia de Balvanera, por el gobierno de Menem. La solución encontrada al problema económico, fue la transformación de gran parte del edificio en locales comerciales, hacia el año 2000. Pero luego, la reforma fue suspendida, dado que el Colegio no respetó lo acordado sobre la NO modificación de la estructura del colegio, intentando construir un estacionamiento subterráneo.
Su presencia siempre estuvo muy ligada a la iglesia, ya que la congregación bayonesa transformó al templo como elegido por los inmigrantes franceses, para casarse o bautizar a sus hijos. En sus aulas estudiaron grandes personalidades de la Argentina, desde Hipólito Yrigoyen, el perito Moreno, Florentino Ameghino, Luis Maria Drago, Ricardo Balbín, Jorge Rafael Videla, Félix Luna, hasta Ricardo Fort, entre otros. 
Y es así que una vez más, nos encontraremos a dibujar en otro rincón de Bs. As. Preparemos nuestras hojas, cuadernos, lápices y pinceles, porque nos espera un nuevo desafío. Allá vamos, en un sábado de agosto, rogándole a San Expedito por un día de sol y poco frío. Nos vemos….
                                                                                           Arq. Sandra Machado

Carlos Sáenz



César Robles

Chuni Torrasa



Diego Escarrá



Eleonora Dorrego



Fede Tessa




Laura Gerlero




Laura Vacs



Mayca Alberto




Ricardo Gersbach


Rubén Cipolla


Coco Rasdolsky


Gaby Terzano




Juan Fricia



Liliana Slutzky


Manuel Domínguez


Sandro Borghini




Sonia Pesajovich


Adhemar Orellana Rioja





Ana Sloninsky


Dora Rud



César Malluk



César Murga


Gustavo Colotto




Juan Carlos Delgado



Rodrigo Aramburú



Oscar Hernandez



Alex Sahores