Ubicado en el Barrio de Retiro, podemos decir que Barrio y Monasterio crecieron al unísono, tal es así que el barrio comenzó a conocerse, desde el establecimiento del Monasterio, como Barrio de las Catalinas.
Fundado en 1727, fue el primer monasterio para mujeres de la Ciudad de Buenos Aires. Construido gracias al Presbítero Dr. Dionisio de Torres Briceño que propuso al rey Felipe V su construcción, quien la autorizó con una única condición; que no alojara más de 40 religiosas. Ubicado originalmente en la esquina de las actuales calles México y Defensa, al morir su fundador fue trasladado al Barrio de Retiro, en 1738, al predio conocido como La Manzana del Campanero formado por las calles San Martin, Viamonte, Av. Córdoba y Reconquista. Su construcción fue realizada sobre planos originales del Arq. Bianchi, italiano, quien realizó la primera obra.
Como parte de nuestra historia, en 1807 fue ocupado por las fuerzas británicas, en la 2º Invasión Inglesa, hasta su rendición. El monasterio sufrió muchos daños, robos y destrozos y hasta fue convertido, como otros de la época, en hospital temporal para los heridos de guerra. Y en 1872, frente a él, debido a la existencia de almacenes en la zona, se construyó un largo muelle llamado “De las Catalinas”, que penetraba varios cientos de mts en el rio y que operó durante 20 años hasta la reestructuración del puerto por el Ing. Madero, lugar que visitamos en la salida pasada.
Su maravillosa arquitectura nos muestra el retablo mayor de la iglesia, de madera tallada, dorada y policromada. Su autor Isidro Lorea, español, sintetizó el barroco, el rococó y el neoclásico. El edificio se construyó en ladrillo y cal y está compuesto de 2 plantas con 2 imponentes claustros para albergar 40 mojas conventuales, las cuales permanecieron allí hasta el año 1974, retirándose al monasterio de San justo y donando las tierras al Arzobispado de Bs. As,
EL acceso a la iglesia es central, con arco de medio punto enmarcado por pilastras toscanas y rematado por un frontis neoclásico. El presbiterio es rectangular con una cúpula baja y tiene una única torre sobre el lado izquierdo. A los costados, galerías donde las monjas participaban de las misas, sin ser vistas.
Las fachadas del monasterio y de la iglesia fueron modificadas por el Arq. Buschiazzo en 1910 perdiendo su austeridad original. Se agregaron vitrales, la imagen de Sta. Catalina de Siena. Pero los altares son originales.
Tanto el monasterio como la iglesia, son uno de los mejores exponentes de la arquitectura Colonial, en Bs As., que todavía subsisten. Fueron declarados Monumento Histórico Nacional en 1942, la iglesia y en 1975, el monasterio.
En el año 2000 se comenzaron nuevas obras de restauración a cargo del Arq. Eduardo Ellis para tratar de recuperarlo su estado original.
La simpleza del lugar y el patio con preciosos árboles, invitan a quedarse. Así que por allí andaremos, como siempre, recorriendo mientras lo dibujamos.
Preparen lápiz y papel, que nos vamos a trasladar en el tiempo, una vez más.
Arq. Sandra Machado
MILO GÓMEZ LUENGO
MATIAS REBECCA
MARIA CATALINA ALBERTO
CARLOS SAÉNZ
HORACIO NONI
CHUNI TORRASSA
SANDRO BORGHINI
GABRIELA TERZANO
JUAN FRICIA
EDUARDO SMUDT
ELEONORA DORREGO
VICTORIA BRAUNSTEIN
ROBERTO FRANGELLA
SUSANA OVIEDO
MANUEL DOMINGUEZ
RUBEN CIPOLLA
CESAR MALLUK
SILVIA ALVAREZ BELLO
LILIANA SLUTZKY
LAURA VACS
SANDRA MASSAZZA
OSCAR HERNANDEZ
ALEX SAHORES
PATRICIA E. ALVAREZ
ANGELA BRAZZANO
MAGDALENA EGGERS
Espectaculares!
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